Con un fernet en la mano, acostada en la hamaca paraguaya les comento que pinto el bajón de medianoche –ya un poco mas de las 12- Es Sabado y yo en mi casa, sola. Miré una película, intente mantenerme on line por un rato y nada. Aburrido, todo es aburrido. Quise también arreglar con mis amigos para salir hoy, hacer algo tranquilo no me importaba. Nadie podía. Nadie quería. Opte también por quedarme junto a mi hermana, su novio y una amiga de ellos, ese plan también fracasó. Entonces podríamos decir para resumir: Es Sabado y estas sola. La soledad del Sabado por la noche trae consigo además de las aterrorizantes ganas de estar con alguien (si, me refiero a una pareja). Las ideas y los pensamientos que hace mucho no se cruzaban por mi mente. Pánico, solo eso. Pánico de que esta vez, todo salga peor que antes. Pánico de quedarme sola. Pánico de volver a caer. Pánico de que se de cuenta que yo todavía lo quiero. Pánico de volver a pasar todo otra vez. Pánico de que me haya olvidado. Pánico de que NOS hayamos olvidado.
Doy por terminado este texto non sense. Que no se por que lo estoy escribiendo y no se por que no habria de hacerlo. Contradiccion, todo es una gran contradicción que parece no esclarecerse nunca y cada dia que pasa estoy mas confundida. Necesito volver a alejarme de toda esta mierda. ¿Mierda yo? ¿Mierda él? Claramente la que esta mal acá, SOY YO. Chau.
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